Según el IMIE de Tinsa el precio medio de la vivienda en España ha caído un 2,2% en el último año, desde noviembre de 2019. Este descenso del 2,2% refleja un ajuste de precios moderado. Pero si se mira un poco más en perspectiva, el dato encierra también una tendencia de estabilización reciente del precio, ya que es el tercer mes consecutivo que el índice general refleja una caída interanual del 2,2%. En el último mes, entre octubre y noviembre, el precio, incluso, se ha incrementado tímidamente dos décimas.
Habiendo ya transcurrido ocho meses desde el estallido de la crisis sanitaria y la declaración del estado de alarma, observamos que el ajuste en términos generales se sitúa en torno al 3% desde marzo, con caídas más acusadas en las islas (casi un 9%) y en la costa mediterránea (un 5%). La evolución en las capitales y grandes ciudades va bastante pareja a la de la media nacional, con un 3% de caída desde marzo.
El grupo que está mostrando mayor estabilidad en este contexto extraordinario es el que reúne a las localidades más pequeñas del interior peninsular, lo que en la estadística se denomina ‘Resto de municipios’. Este grupo muestra actualmente un nivel de precio medio de vivienda nueva y usada prácticamente igual al que tenía hace un año, en noviembre de 2019, apenas ha variado una décima respecto al mes anterior y tan solo está un 0,6 % por debajo del nivel de marzo, el mes en el que todo comenzó a complicarse. Las cifras medias de variación de los dos últimos meses en ‘Resto de municipios’ se acercan al promedio de los dos últimos años.
Y, para acabar, una pincelada con perspectiva temporal: el precio medio en España es un 14 % superior al mínimo que tocó en la crisis, en febrero de 2015.
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