Se confirma así que esta nueva coyuntura de mercado, que ya estábamos viendo en la reducción de las compraventas de vivienda, se ha trasladado a los precios con bastante rapidez. Todas las comunidades autónomas, según el IMIE de Tinsa, han reducido el valor medio de la vivienda respecto al que tenían seis meses atrás, justo antes de que se iniciara la crisis sanitaria. Con la excepción de tres regiones, todas las comunidades han registrado también caídas en tasa interanual, lo que lleva a esta evolución negativa de la media nacional, que no se veía desde el tercer trimestre de 2015.
No todas las tipologías ni ubicaciones han tenido el mismo recorrido. Así la obra nueva muestra por ahora una mayor resistencia y estabilidad que la vivienda de segunda mano. Y en estos primeros momentos han notado especialmente el ajuste las provincias de interior menos pobladas, donde no se llegaron a producir incrementos de precios relevantes con la recuperación de la demanda. Diez provincias tienen en este momento el precio medio más bajo desde que estallara, no esta crisis, sino la crisis anterior, la financiera de 2008. Son cinco provincias de Castilla y León, y alguna en Galicia, Aragón, Extremadura y Castilla-La Mancha.
El ajuste también se ha percibido en las grandes urbes. Barcelona ha visto caer su valor medio un 4,7% anual. En Madrid, el descenso del 3,6% supone la primera caída interanual desde el primer trimestre de 2015.
En esta primera fase de la crisis, en las que el mercado todavía está acomodándose, no hay que quedarse con los porcentajes concretos de variación (dónde cae más el precio o con qué intensidad), Lo significativo es la tendencia que apuntan esos datos. Los mercados con poco dinamismo están más expuestos a porcentajes de variación llamativos que, en muchos casos, se verán corregidos posteriormente. Es la panorámica de dos o incluso tres trimestres consecutivos lo que permite definir la tendencia de un mercado, especialmente cuando más se acota su tamaño. Así que será un poco más adelante cuando la evolución de los distintos mercados permita distinguir entre variaciones puntuales y la tendencia general.
Con la prevención de que existen todavía muchas incertidumbres que pueden alterar el escenario, las previsiones apuntan a que se va a prolongar el descenso de valores en los próximos meses. Este -0,4% es una primera confirmación de que podemos dar por terminado un ciclo expansivo de demanda, que, aunque fue común a todo el territorio español, acabó trasladándose a los precios de forma muy heterogénea en plazos e intensidades. Se inicia una nueva etapa. ¿Hasta dónde nos llevará?
Escucha aquí la intervención completa de Susana de la Riva, directora de Marketing y Comunicación de Tinsa, el pasado jueves 1 de septiembre en la sección ‘El Dato del Día’ en el programa Inversión Inmobiliaria de CapitalRadio.