Considerando globalmente la vivienda nueva y usada, el índice general muestra en febrero un crecimiento del 0,7% en el último año. Es decir, en tasa interanual. Como apunta Susana de la Riva, este dato refleja una situación de estabilidad. No solo porque el porcentaje de crecimiento sea modesto, un 0,7%, sino porque es la misma tasa interanual que observamos el mes anterior, en enero. Desde entonces, el índice general ha descendido apenas dos décimas. Parece, por tanto, que se consolida la recuperación de precios que se inició en noviembre tras unos meses de marcada tendencia a la baja.
La estadística IMIE General de febrero nos muestra que en las capitales y grandes ciudades el valor medio se ha reducido un 1,3% en el último mes, frente a la tendencia al alza que había mostrado en los últimos meses. Habrá que ver si se queda en un freno puntual. Lo cierto es que las capitales y grandes ciudades es el único grupo con un valor medio inferior al que tenía un año antes. Es decir, es el único que registra caídas en tasa interanual. Desde marzo de 2020 ha perdido un 0,7% de su valor.
Más acusadas ha sido las caídas durante la pandemia en la costa mediterránea, que se ha dejado un 2,6% de su valor desde marzo del año pasado, y en las islas, donde el descenso desde el inicio de la crisis es del 1,4%. Son mercados que se han visto adicionalmente afectados por el mayor peso de vivienda vacacional y el cierre de fronteras, aunque en los últimos meses han ido recuperando parte de la depreciación registrada en los primeros momentos del shock. En estos momentos, el precio en las islas estaría un 3,7% por encima del de un año antes. Sin embargo, no hay que perder de vista que tanto islas como la costa mediterránea son mercados más susceptibles de registrar picos en su evolución y hay que dar un margen de unos meses hasta confirmar tendencia.
Y como tercer punto destacado de esta estadística, vemos que los mercados más pequeños de interior, recogidos en el grupo Resto de Municipios, son los que se han mantenido más estables ante el shock. Su precio medio está un 2,2% por encima de un año antes y es el único grupo que no ha perdido valor desde el inicio de la crisis: se ha incrementado un 1,8% desde marzo. Esta evolución estaría reflejando ese nicho de la demanda, que aunque es residual dentro del conjunto del mercado, ha surgido al calor de la pandemia, buscando lugares más apartados y salir de las grandes ciudades.
No te pierdas la intervención completa de nuestra directora de Marketing y Comunicación, Susana de la Riva, en este audio